La Bimota Tesi H2 no es simplemente una moto más. Es el resultado de una alianza entre dos gigantes con estilos radicalmente distintos:
Bimota, la marca italiana famosa por su ingeniería extravagante y producciones limitadas; y Kawasaki, el coloso japonés que hace máquinas con ADN de cohete.
El resultado: una superbike que combina lo mejor de dos mundos y rompe con cualquier lógica tradicional. La Tesi H2 no es solo una moto, es una obra de ingeniería sin compromisos.
Kawasaki aportó el corazón de esta bestia: el motor sobrealimentado de la Ninja H2, mientras que Bimota se encargó del cuerpo y el alma, con su característico sistema de suspensión delantera alternativo. Estamos hablando de una moto que no solo corre, sino que desafía la manera en que entendemos el diseño y comportamiento de una superbike.
El Motor Sobrealimentado Que Casi No Tiene Rivales
El corazón de la Tesi H2 es el mismo de la famosa Kawasaki Ninja H2: un motor de 998 cc, cuatro cilindros en línea, equipado con un supercargador que le permite alcanzar los 231 caballos de fuerza.
Pero cuando se le aplica ram-air (en velocidad alta), esa cifra sube aún más, llegando a los 242 hp. Sí, leíste bien: una moto con más potencia que muchos autos deportivos de lujo.
Esta potencia brutal se traduce en una aceleración feroz que parece sacada de un videojuego. No hay demora, no hay espera. Apenas giras el acelerador, la Tesi H2 reacciona como si quisiera despegar del suelo. Pero lo más sorprendente es que, a pesar de esa locura mecánica, todo se siente refinado, medido y controlado gracias a la electrónica avanzada y el chasis diseñado a medida.
Suspensión Delantera De Otro Mundo
Una de las cosas más llamativas de la Tesi H2 es su sistema de dirección y suspensión delantera. Aquí no encontrarás una horquilla tradicional. En cambio, Bimota usa un sistema de basculante delantero con dirección por barra, lo que permite que el chasis no se flexione como ocurre con una horquilla telescópica.
Este sistema tiene varias ventajas: menos transferencia de peso al frenar, mayor estabilidad en curva, y una respuesta más predecible cuando empujas la moto al límite. Pero también tiene un comportamiento muy distinto al que la mayoría está acostumbrada. Por eso, la Tesi H2 no es una moto para cualquiera: exige adaptación, paciencia y respeto. Pero cuando logras conectar con ella, la experiencia es simplemente única.
Diseño Que Parece De Ciencia Ficción
Visualmente, la Tesi H2 parece salida de una película futurista. Su chasis expuesto, el diseño angular, los paneles de carbono, la pintura metalizada y los detalles mecanizados la hacen destacar como una moto que no debería existir… pero existe. Es imponente, agresiva y minimalista al mismo tiempo.
No tiene líneas suaves ni busca caerle bien a todo el mundo. Es una moto de carácter fuerte, con presencia abrumadora. Si la ves en persona, es probable que te detengas a observarla como si fuera una escultura tecnológica. Todo está donde debe estar, pero nada es tradicional. Y eso es parte de su magia.
Electrónica A La Altura De Su Potencia
Toda esa potencia y diseño necesitan un cerebro que mantenga el orden. La Tesi H2 viene cargada con electrónica de última generación: control de tracción, ABS en curva, quickshifter, modos de conducción, control de freno motor, launch control y más. Kawasaki aportó su experiencia en esta parte, lo que garantiza que toda la furia del motor se canalice de manera inteligente.
Además, cuenta con una pantalla TFT a color totalmente configurable, que te permite controlar cada aspecto del comportamiento de la moto. Y lo mejor es que, a pesar de su complejidad interna, la interfaz es clara y fácil de usar.
Precio, Exclusividad Y Filosofía
Esta moto no es para cualquiera, y no lo decimos solo por su potencia. La Tesi H2 es una máquina de producción limitada, hecha casi a mano, con materiales premium y una ingeniería que pocas marcas se atreven a explorar. Su precio supera fácilmente los $60,000 USD, lo que la pone en una categoría donde no solo compras velocidad, sino también arte, exclusividad e innovación pura.
Es una moto para quien busca lo inusual, lo radical, lo diferente. Para quien ya ha probado muchas deportivas y quiere algo que desafíe todo lo que conoce sobre motocicletas. Es una pieza de colección, pero también una máquina plenamente funcional y peligrosamente adictiva.