Estas motos logran un equilibrio perfecto entre la facilidad de manejo y un diseño que roba miradas.
Son modelos que te permitirán desarrollar tus habilidades de conducción con seguridad, mientras disfrutas de una estética moderna, deportiva o robusta que no delata su naturaleza «amigable para novatos».
1. Kawasaki Ninja 400
La Kawasaki Ninja 400 es una de las opciones más populares y mejor valoradas para principiantes que buscan un look de moto deportiva «grande». Su diseño agresivo, con carenados afilados y una postura deportiva, la hace parecer una moto de mayor cilindrada, como sus hermanas mayores de la serie Ninja.
Sin embargo, su motor bicilíndrico de 399cc ofrece una potencia controlable y lineal (alrededor de 45 CV), un peso ligero y una ergonomía que, aunque deportiva, no es excesivamente radical, lo que la hace muy manejable para aprender.
2. Yamaha YZF-R3
Similar a la Ninja 400, la Yamaha YZF-R3 es otra excelente opción para quienes buscan una deportiva con estética de competición pero apta para principiantes. Su diseño está claramente inspirado en las superbikes de Yamaha, como la R6 o la R1, con líneas aerodinámicas y un carenado completo.
Equipa un motor bicilíndrico de 321cc (unos 42 CV) que es suave, potente para su categoría y muy fiable. Es ligera, ágil y ofrece una posición de conducción que te permite sentirte conectado con la moto sin ser demasiado exigente físicamente.
3. Honda CB300R
Si te atrae el estilo «naked» o neo-retro, la Honda CB300R es una moto que impresiona por su calidad y su diseño minimalista pero sofisticado. Forma parte de la familia «Neo Sports Café» de Honda, con un faro redondo LED, un depósito musculoso y acabados de alta calidad que le dan una apariencia de auto de mayor precio.
Su motor monocilíndrico de 286cc (unos 30 CV) es muy dócil y fácil de controlar, mientras que su peso ligero y su chasis equilibrado la hacen increíblemente divertida y fácil de manejar en el día a día.
4. KTM 390 Duke
Para los que buscan una estética más radical y «agresiva» de una naked, la KTM 390 Duke es una elección sobresaliente. Con su chasis multitubular naranja expuesto, su diseño afilado y su faro LED distintivo, la «Duke» se ve como una moto de calle de alta gama.
Su motor monocilíndrico de 373cc (unos 44 CV) ofrece una entrega de potencia muy viva y emocionante, pero sigue siendo ligera y sorprendentemente manejable para principiantes que buscan una curva de aprendizaje más dinámica. Además, suele incluir tecnología avanzada como ABS y pantalla TFT.
5. Royal Enfield Continental GT 650
Si tu gusto se inclina más hacia un estilo café racer clásico con un toque «vintage» pero imponente, la Royal Enfield Continental GT 650 es perfecta. No es una moto «deportiva» en el sentido moderno, pero su estética es innegablemente atractiva y madura, luciendo mucho más cara y «pro» de lo que su precio y cilindrada sugieren.
Su motor bicilíndrico en paralelo de 648cc (unos 47 CV) es suave y fácil de gestionar para un novato, ofreciendo un par motor generoso a bajas revoluciones que evita la necesidad de un uso constante del cambio. Su sonido y su presencia en carretera te harán sentir como un verdadero purista de las motos.